Esta técnica que se ha estado haciendo desde hace mucho tiempo parece que regresa, y lo hace porque funciona, incluso sin necesidad de separar la plaquetas.
Se saca sangre del paciente y se vuelve a ingresar en la zona afectada, normalmente por desgarro, rotura... y jamás cuando hay inflamación.
El problema es que legalmente no podemos sacar sangre los Fisios.