Bursitis de rodilla: causas, síntomas y tratamiento

¿Tu rodilla te pone la vida en modo difícil? Exploramos la bursitis de rodilla, un problema muy común. Aprende a reconocer los síntomas y afrontar el tratamiento de manera efectiva. Dile adiós al dolor y recupera la comodidad al caminar.

Bursitis de rodilla: causas, síntomas y tratamiento
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22/02/2024 | Actualizado: 22/02/2024 22/02/2024
  1. ¿Qué es la bursitis de rodilla?
  2. ¿Cuáles son las causas más comunes de la bursitis en la rodilla?
    1. Factores que aumentan el riesgo de padecer bursitis
  3. Síntomas de la bursitis en rodilla
  4. ¿Hay tratamiento para la bursitis de rodilla?
    1. Fisioterapia: una solución efectiva para la bursitis en la rodilla
      1. Ejercicios recomendados para fortalecer los huesos
  5. Consejos para prevenir la bursitis en la rodilla

¿Alguna vez has experimentado inflamación, sensibilidad, calor y un dolor punzante en la rodilla que te impide disfrutar de las actividades que más te gustan? Si es así, es posible que estés lidiando con la bursitis de rodilla, un problema común, pero a menudo subestimado, que afecta a muchas personas.

La rodilla es una de las articulaciones más utilizadas del cuerpo, por lo que está expuesta a numerosas lesiones. No importa si eres un atleta, un entusiasta del fitness o, simplemente, alguien que busca alivio, ¡estás en el lugar correcto!

En este artículo, descubrirás lo que es exactamente la bursitis de rodilla, cómo identificar los síntomas y lo más importante, cómo tratarla de manera efectiva, incluyendo, también, la magnetoterapia. Prepárate para decir adiós a ese dolor molesto,  recuperar la funcionalidad de tu rodilla y dar la bienvenida a una vida activa y sin limitaciones.

¡Comenzamos!

¿Qué es la bursitis de rodilla?

La bursitis en la rodilla es una inflamación de la bolsa sinovial o bursa. Es una estructura que tiene forma de saco y se encuentra entre las partes duras u óseas de las articulaciones y las blandas (tendones, músculos y piel).

Estas bursas tienen la función principal de lubricar las articulaciones, reducir el roce con el hueso y amortiguar. ¿Cuáles son las que tienen mayor tendencia a inflamarse? La del codo, la cadera, el hombro y la rodilla.

Cuando aparece una bursitis de rodilla, que es el caso que nos ocupa, se restringe el movimiento en esta zona y sientes dolor, rigidez y hasta dificultad para caminar. Todo esto se produce porque aumenta la producción de líquido sinovial.

En esta articulación, podemos identificar 5 tipos de bursas:

  • Prerrotuliana
    Es muy propensa a la inflamación y se halla en la cara anterior de la rótula.

  • Infrarrotuliana superficial
    Se localiza por delante del tendón rotuliano.

  • Infrarrotuliana profunda
    Es aquella que se halla entre el tendón rotuliano y la grasa corporal infrapatelar.

  • Pata de ganso
    Está en la superficie interna de la rodilla.

  • Semimembranosa
    Se localiza por encima de la pata de ganso, en el lado medial de la rodilla.

¿Cuáles son las causas más comunes de la bursitis en la rodilla?

Existen diferentes causas de la bursitis de rodilla, entre ellas:

  • Golpes directos
    Los golpes directos en la propia rodilla pueden provocar una inflamación en las bursas.

  • Sobrecarga
    Correr, saltar y montar en bici son actividades que sobrecargan la rodilla de manera repetitiva. Esto puede irritar las bolsas sinoviales y desarrollar bursitis.

  • Presión constante
    Un exceso de tensión o presión continuada en el tendón provoca una inflamación por microtraumatismos repetitivos o estrés. De igual manera, permanecer en cuclillas durante un largo período de tiempo o arrodillarse en superficies duras favorece la bursitis en la rodilla.

    Otra forma de denominar a esta afección es rodilla de la criada o rodilla de beata, aunque también se conoce como rodilla de corredor.

  • Actividades extenuantes
    Aquellos deportes donde hay caídas recurrentes, golpes o es necesario permanecer con las rodillas dobladas durante mucho tiempo aumentan el riesgo de bursitis.

    Algunos ejemplos son el rugby, las artes marciales o el voleibol, pero también afecta a los profesionales instaladores, jardineros o carpinteros que están mucho tiempo arrodillados.

Causas comunes de bursitis de rodilla

  • Complicaciones
    Una infección bacteriana de la propia bolsa puede aumentar el riesgo de padecer esta inflamación en la rodilla.

Factores que aumentan el riesgo de padecer bursitis

Como hemos visto, no existe una causa específica que desencadene las bursitis de rodilla. Aun así, sí hay ciertos factores que hacen que el riesgo de padecerla sea mayor.

¿Cuáles son?

  • Obesidad. La bursitis de la pata de ganso es habitual en mujeres obesas que padecen artrosis.
  • Condromalacia rotuliana.
  • Enfermedades reumáticas (gota, artritis, artrosis) o metabólicas (diabetes).
  • Mala ejecución en determinados movimientos funcionales.
  • Déficit biomecánico o desalineación en la articulación femoropatelar.

Las enfermedades reumáticas y las lesiones pueden tener una recuperación complicada. Es en estos casos cuando la magnetoterapia puede, no solo ayudar, sino ser el factor diferencial en la rehabilitación gracias a sus efectos a nivel celular y en el tejido afectado. 

Abel

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Abel Renovell Cofundador y fisioterapeuta colegiado

Síntomas de la bursitis en rodilla

Los síntomas de la bursitis en la rodilla y su tratamiento dependerán de la bolsa que se vea afectada y el motivo de la inflamación.

De forma general, puedes notar una mayor sensibilidad en la articulación, además de calor e hinchazón al presionarla. Además, puedes sentir ciertas molestias o incluso dolor tanto en reposo como en movimiento.

Un fuerte golpe en esta zona puede hacer que la bursitis en la rodilla y sus síntomas aparezcan de manera repentina. No obstante, en la mayoría de situaciones esta afección se produce debido a la fricción e irritación de la bursa. En consecuencia, los síntomas no son repentinos, sino que empeoran de forma gradual con el paso del tiempo y son los siguientes:

  • Dolor, cojera, rigidez, impotencia funcional o limitación.
  • Dolor muy intenso, como si se tratase de una puñalada.
  • Hinchazón o edema similar al tamaño de una pelota en la cara anterior de la rodilla.
  • Puede aparecer un hematoma visible si se dañan los vasos del interior de la bolsa sinovial. En este caso, la sangre se vierte y acumula dando lugar a una bursitis hemorrágica. Los movimientos de flexión y extensión, así como la presión en la bursa, exacerban la sintomatología asociada.

En algunos casos se puede producir una bursitis séptica, es decir, que se infecte la bolsa sinovial. Si se da esta situación, lo mejor es acudir al servicio médico, ya que al dolor y la hinchazón puede sumarse la fiebre.

Síntomas de bursitis en la rodilla

¿Hay tratamiento para la bursitis de rodilla?

Una vez que el profesional ha diagnosticado bursitis de rodilla y sus causas, pasamos a la fase del tratamiento. En primer lugar, este va a depender de la gravedad de la afección y su detonante.

No obstante, lo habitual es combinar una serie de cuidados personales con fármacos y un tratamiento de fisioterapia específico para la bursitis de rodilla.

Los cuidados personales pasan por elevar la rodilla durante unas horas al día para reducir la inflamación, evitar actividades que ejerzan presión en la articulación y aplicar hielo varias veces al día.

Por su parte, los fármacos que prescribirá el médico son principalmente analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos. Con ellos, se minimizan tanto la inflamación como el dolor. Si lo considera, también puede recomendar las infiltraciones de corticoides y, en los casos más severos, cuando no quedan opciones de tratamiento, una cirugía. En la intervención se extirpa la bursa inflamada y hay que indicar que su porcentaje de éxito es de un 95 %.

Pero antes de llegar a este extremo, también se recomienda la fisioterapia para la bursitis de rodilla.

Fisioterapia: una solución efectiva para la bursitis en la rodilla

Los ejercicios de fisioterapia te pueden ayudar a mejorar la flexibilidad, reducir el dolor y fortalecer la musculatura de la articulación. Asimismo, serán de gran ayuda para prevenir la recidiva de la bursitis en un futuro.

Por otro lado, te ayudarán a corregir posturas nocivas en tu jornada laboral que pueden desarrollarla.

Otra de las acciones que complementará el trabajo con el fisioterapeuta es alquilar o comprar un equipo de magnetoterapia, pues favorecerá tu recuperación y acortará los plazos previstos. Puedes echar un vistazo a los equipos que tenemos disponibles en nuestra tienda online.

Ejercicios recomendados para fortalecer los huesos

Entre los ejercicios habituales para el tratamiento de la bursitis de rodilla con fisioterapia, destacan los siguientes:

  • Sentadillas de 90 grados
    Apoya la espalda en la pared, flexiona un poco las rodillas y haz una sentadilla hasta 90 grados. Aguanta 5 segundos y repite otras 9 veces.

Sentadilla como ejercicio de fisioterapia para bursitis

  • Fortalecimiento de la musculatura lateral.
    Túmbate de lado sobre la pierna sana y realiza un movimiento con la pierna dolorida estirada hacia el techo. Aguanta 5 segundos y repite en otras 9 ocasiones.

  • Fortalecimiento de la musculatura anterior de la pierna.
    Ponte de espaldas a una espaldera y rodea tu tobillo con una goma elástica que estará anclada a la espaldera. Haz un movimiento hacia delante con la pierna afectada.

    Aguanta la posición 5 segundos y repite.

  • Fortalecimiento de la musculatura posterior de la pierna.
    Exactamente igual que el anterior, solo que el movimiento debes hacerlo hacia atrás.

  • Fortalecimiento de los isquiotibiales.
    Tumbado boca abajo, lleva el talón de la pierna afectada hacia el trasero. Aguanta 5 segundos y repite hasta 10 veces.

Consejos para prevenir la bursitis en la rodilla

Nuestro mejor consejo para prevenir la bursitis en la rodilla es evitar las situaciones en las que te apoyas en dicha articulación. Sin embargo, a nivel profesional esto no es fácil de llevar a cabo.

Si es tu caso, te recomendamos que utilices rodilleras para apoyarte en una superficie más blanda que amortigüe y proteja tu articulación. Evita permanecer en cuclillas durante mucho tiempo o doblar repetidamente las rodillas. Además, conviene realizar descansos regulares para estirar las piernas.

Por último, mantente en un peso saludable. Así, te asegurarás de que la presión de la rodilla no es superior a la necesaria.

Si necesitas más información sobre cómo puedes deshacerte de las molestias de la bursitis de rodilla con un equipo de magnetoterapia profesional en tu propia casa, contacta con nuestros asesores especializados.

Abel Renovell Cofundador y fisioterapeuta colegiado

Abel ha conseguido dos retos: Uno, mantener a Efisioterapia como referente en el sector durante 20 años, escribiendo y revisando cientos de artículos de alta calidad sobre salud y fisioterapia, suyos y de otros especialistas. Dos, compaginarlo durante varios años mientras ejercía de fisioterapeuta en su propia clínica, hospitales y clubs deportivos.

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