Abel ha conseguido dos retos: Uno, mantener a Efisioterapia como referente en el sector durante 20 años, escribiendo y revisando cientos de artículos de alta calidad sobre salud y fisioterapia, suyos y de otros especialistas. Dos, compaginarlo durante varios años mientras ejercía de fisioterapeuta en su propia clínica, hospitales y clubs deportivos.
Fisioterapia y Magnetoterapia: una relación perfecta
La magnetoterapia es el complemento perfecto en las sesiones de fisioterapia para tratar patologías que causan dolor e inflamación.
- Qué es la magnetoterapia
- ¿Cómo se utiliza la magnetoterapia en fisioterapia para patologías crónicas?
- Pero ¿en qué consiste la magnetoterapia?
- Los beneficios de la magnetoterapia
- ¿Y para qué se utiliza la magnetoterapia?
La fisioterapia siempre se ha ejercido de manera manual con notables resultados. Pero, como toda ciencia de la salud, avanza introduciendo nuevas técnicas que mejoran su eficacia a niveles que antes eran inimaginables. Por ejemplo, la magnetoterapia.
¿Dudas si introducir esta terapia en los tratamientos de rehabilitación? En esta entrada te explicaremos por qué la fisioterapia y la magnetoterapia son dos técnicas más que complementarias.
Qué es la magnetoterapia
El cometido de la magnetoterapia en fisioterapia es restablecer el equilibrio químico en la célula aplicando campos magnéticos pulsados. Aplicada de forma adecuada (por ejemplo, con los aparatos de I-Tech Medical Division), ofrece numerosas ventajas y ninguna contraindicación relevante.
En sus inicios, esta técnica se utilizaba casi en exclusiva como un tratamiento para favorecer la regeneración del tejido óseo. Pero su uso frecuente ha demostrado que también tiene capacidad para regenerar músculos y tendones.
Esta versatilidad viene por las distintas combinaciones de intensidades y frecuencias utilizables con los aparatos. La magnetoterapia trabaja con altas intensidades (medidas en Gauss y que van de 150 a 200).
Y respecto a la frecuencia del pulso magnético, podemos diferenciar su aplicación en tres rangos: de 1 Hz a 25 Hz, de 25 a 50 Hz y de más de 50 Hz.
Según sean estas magnitudes físicas, y cómo se apliquen, podremos tratar distintas patologías. En el caso de las patologías agudas, lo habitual es utilizar bajas frecuencias de 1-25 Hz. En el siguiente vídeo puedes verlo en acción con dispositivos de I-Tech Medical Division.
¿Cómo se utiliza la magnetoterapia en fisioterapia para patologías crónicas?
En las sesiones de fisioterapia con magnetoterapia para tratar patologías crónicas se suelen utilizar frecuencias de 50 Hz. Las que los superan están indicadas para programas que combinan múltiples frecuencias. Así que en una misma sesión se pueden alcanzar diferentes tejidos diana a la vez.
Aun así, la intensidad, frecuencia y duración del tratamiento deben tener una relación directa con los síntomas que presenta la patología.
- La duración del tratamiento
Lo normal es aplicar la magnetoterapia en periodos de 20-30 días seguidos.
Pasado este tiempo, un profesional debe verificar la evolución de la dolencia. Si lo considera, modificará los parámetros de tu equipo para realizar otro ciclo de sesiones. - Las sesiones
Suelen ser diarias y las aplicaciones acostumbran a tener una duración aproximada de 45 minutos.
Incluso se pueden realizar más de una vez al día, sobre todo si se dispone de un equipo domiciliario como los de I-Tech Medical Division. Pero esto es solo orientativo, porque lo recomendable es que el médico o fisioterapeuta decidan las pautas de aplicación para verificar la evolución del tratamiento.
En ciertas ocasiones es posible percibir un aumento de las molestias, pero eso solo debe ocurrir en las primeras sesiones y se debe a una respuesta inflamatoria temporal. Posteriormente, se notará una mejoría de los síntomas.
Las molestias irán disminuyendo en intensidad tras cinco o seis sesiones de tratamiento. Si no fuera así, se debe consultar al médico o fisioterapeuta.
Otro efecto que los pacientes perciben como positivo tras las sesiones de magnetoterapia es la somnolencia. Con este tratamiento, muchas personas nos indican que mejoran su calidad de sueño, algo indispensable para favorecer el proceso de rehabilitación, ya que el descanso es fundamental.
Pero ¿en qué consiste la magnetoterapia?
La base del uso de la magnetoterapia radica en que las células del cuerpo tienen diferentes cargas eléctricas.
Los equipos de magnetoterapia generan unos campos magnéticos que transmiten energía eléctrica de una forma sencilla. La energía alcanza diferentes profundidades en los tejidos del cuerpo.
Estas corrientes eléctricas tienen un efecto claro y directo sobre los procesos de alimentación de las células. Como consecuencia, esto actuará sobre la producción de energía, acelerando la función de las mitocondrias y proporcionando la fuerza vital para activar la mitosis.
Cuando enfermas, se desequilibra tu energía, las células se desvitalizan, se produce un desequilibrio iónico y el potencial de membrana celular desciende a niveles peligrosos.
La magnetoterapia actúa favoreciendo el reequilibrio de la llamada bomba sodio-potasio, el sistema utilizado por la célula para «crear» electricidad a través de su membrana.
Si suena complejo es porque lo es. Pero también es maravilloso.
Y es de los motivos principales por los que esta terapia es tan eficaz: porque interviene prácticamente en el origen de todo proceso de recuperación.
¿Cómo lo consigue?
Con unos imanes, denominados solenoides, que funcionan a alta o baja frecuencia e intensidad. Todo dependerá de la dolencia que se pretenda tratar.
¿Cuáles son las patologías que trata la fisioterapia con magnetoterapia con mayor frecuencia?
- Procesos reumáticos
- Artropatías inflamatorias y degenerativas
- Reumatismos periarticulares
- Miositis
- Tendinitis
- Migrañas
- Luxaciones
- Contracturas musculares
- Esguinces
- Edemas óseos
- Osteoporosis
- Neuralgias
- Fibromialgia
- Cicatrización de heridas
- Trastornos circulatorios
- Insomnio
- Otras patologías similares
La magnetoterapia se utiliza en fisioterapia porque los campos magnéticos de baja frecuencia son muy eficaces para recuperar las condiciones fisiológicas.
En las estructuras anatómicas se producen efectos antiinflamatorios, analgésicos, de regeneración de tejidos y de reabsorción de edemas.
Asimismo, esta terapia favorece la consolidación de la masa ósea y, por tanto, acelera la reparación de fracturas.
Los beneficios de la magnetoterapia
Si tuviéramos que identificar los dos efectos más importantes de la magnetoterapia, hablaríamos de los analgésicos y los curativos. Sin embargo, son muchos los beneficios de la magnetoterapia en fisioterapia.
Por eso, cada vez se utiliza más desde sus inicios en la medicina deportiva a mediados de los 90.
La eficacia, comodidad y rapidez de los tratamientos de fisioterapia con magnetoterapia son sus señas de identidad.
Las ventajas de la magnetoterapia en fisioterapia son:
- Ayuda a relajar el músculo
Se puede utilizar en cualquier zona del cuerpo que haya sufrido una lesión. Libera las tensiones musculares y produce un efecto antiespasmódico. - Favorece la producción de tejido óseo
La acción de los campos electromagnéticos estimula que los osteoblastos produzcan tejido óseo. Por otro lado, acelera la producción de colágeno, lo que fortalece el hueso, pero también favorece la cicatrización de tendones, músculos y heridas. - Mejora la vasodilatación
Este efecto favorece la regeneración de tejidos y su desintoxicación. Además, actúa como antiinflamatorio. Por otro lado, aumenta el riego sanguíneo y estimula el retorno venoso.
Esto mejora la absorción de nutrientes, los niveles de colesterol, promueve la regeneración del tejido y reduce la presión sanguínea. - Actúa como analgésico
La magnetoterapia en fisioterapia actúa sobre las terminaciones nerviosas que provocan la inflamación, reduciendo el dolor provocado por una lesión de cualquier tipo. - Relajación generalizada
La terapia libera e incrementa el nivel de endorfinas de tu organismo. Por tanto, su efecto es positivo porque permite mejorar y sanar en diferentes aspectos (ansiedad, insomnio, lesiones…).
¿Y para qué se utiliza la magnetoterapia?
En la actualidad, los fisioterapeutas recurren de forma habitual a los campos magnéticos de baja frecuencia y alta intensidad por sus efectos y ventajas en el paciente.
Pero lo mejor de todo es que no necesitas acudir a un centro especializado para disfrutar de todos los que te aporta este tipo de tratamiento. En la actualidad, gracias a la evolución de la tecnología, es posible contar en casa con un equipo profesional de uso particular para el paciente.
Son muy fáciles de manejar y sus resultados son evidentes.
Los dispositivos de magnetoterapia en fisioterapia ofrecen una gran utilidad en diferentes afecciones del sistema nervioso, circulatorio, aparato locomotor e, incluso, en la piel.
Sus efectos regeneradores, unidos a su alta tasa de penetración en el cuerpo humano, hacen del magnetismo terapéutico un tratamiento preciso. Además, es muy sencillo de aplicar y ayuda eficazmente frente a procesos inflamatorios y múltiples patologías que cursan con dolor local.
Con esas virtudes, es lógico que la magnetoterapia haya ido entrando en las clínicas de fisioterapia desde hace unas décadas. Con los dispositivos de I-Tech Medical Division también se puede hacer la rehabilitación en casa.
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Efectos fisiológicos de los campos magnéticos
Los campos magnéticos de baja frecuencia, entre 1 y 120 Hz, generan unos potentes cambios bioquímicos, entre los que cabe destacar:
- Movimiento inducido de sustancias ionizadas en disolución
La aplicación de la magnetoterapia permite movilizar y provocar cambios en profundidad donde se localizan los iones en nuestro cuerpo. ¿Y dónde se encuentran? En el torrente sanguíneo, en el plasma o en los diferentes tejidos del cuerpo humano.
Esta es una de las razones principales por las que se utiliza la magnetoterapia en fisioterapia. Puede parecer algo insignificante, pero lo cierto es que no hay ninguna otra técnica ni equipo que pueda actuar con la misma intensidad y eficacia en zonas alejadas de la superficie del cuerpo.
- Regeneración acelerada del tejido óseo
Se produce gracias a la acción sobre los osteoblastos, que son las células generadoras de hueso. - Se facilita el efecto trófico
Al mejorar el riego sanguíneo en la zona tratada, mejora la absorción de nutrientes y se favorece la recuperación. Por lo tanto, los tejidos eliminarán más rápido las sustancias tóxicas y se alimentarán y oxigenarán de una forma más eficaz. - Normalización de la bomba sodio-potasio
Con la aplicación de los campos magnéticos se produce un aumento del metabolismo del paciente, lo que origina la estabilización de la bomba sodio-potasio del organismo.
Efectos fisiológicos de la magnetoterapia
A continuación, vamos a detallar cuáles son otros de los principales efectos de la magnetoterapia sobre los tejidos y los órganos del cuerpo humano.
Efecto analgésico de la magnetoterapia
La mayor parte de los pacientes que acuden a tratamientos de fisioterapia nos transmiten, casi siempre, su preocupación por el dolor persistente que sienten.
El uso de la magnetoterapia tiene un efecto analgésico comprobado.
Al aplicarla en fisioterapia no solo podemos actuar sobre lo que dificulta la amplitud de movimientos y el desarrollo de la fuerza. Con ella evitamos un gran obstáculo, uno invisible y psicológico que provoca el abandono del tratamiento e impide una rehabilitación completa, el dolor.
Gracias a estos equipos y a su efecto para paliar el dolor, se consigue un mayor índice de recuperación. ¿Cómo se produce este alivio? Debido a su efecto antiinflamatorio y liberador del exceso de presión en la musculatura. Esto favorece la relajación, lo que la hace una terapia idónea en casos de insomnio, dolores de cabeza y estrés.
El efecto de equilibrio provocado sobre el potencial de membrana eleva el umbral del dolor y, por lo tanto, la molestia que percibes es menor.
Efecto vasodilatador de la magnetoterapia
Los efectos del magnetismo de baja frecuencia y alta potencia sobre la dilatación de los vasos sanguíneos también están más que demostrados.
A nivel local, se produce un aumento de la circulación y ligeramente de la temperatura, lo que incrementa la irrigación en los tejidos. A su vez, mejora de manera directa la nutrición celular, reduce la inflamación y reequilibra la circulación de los tejidos en los que se aplica.
Del mismo modo, la vasodilatación favorece el aumento del nivel de oxígeno en los tejidos y disminuye la concentración de anhídrido carbónico.
Efecto antiinflamatorio de la magnetoterapia
El efecto antiinflamatorio de la magnetoterapia tiene su base en la actuación directa de los campos magnéticos de baja frecuencia.
Estos producen un aumento de la circulación y facilitan un flujo sanguíneo normal del paciente. Como consecuencia, se aumenta el nivel de oxígeno y de nutrientes necesarios para la célula, que permitirán tanto su reparación como la obtención de energía.
Además, los elementos tóxicos son eliminados con mayor eficacia y sus efectos inflamatorios negativos irán desapareciendo poco a poco con ellos.
Efectos de la magnetoterapia sobre el tejido óseo
Entre los usos más conocidos de la fisioterapia y la magnetoterapia están aquellos relacionados con su efecto sobre los huesos. En concreto, su ayuda en casos de osteoporosis está más que demostrada.
La corriente de baja intensidad se aplica mediante un método denominado piezoelectricidad. Así, los campos magnéticos tienen la capacidad de generar en el tejido óseo corrientes eléctricas de mínima intensidad. Estas incitan a los osteoblastos a incrementar la producción de hueso y colágeno, lo que constituye más del 20 % del tejido óseo.
Por este motivo, sus usos para el tratamiento de la distrofia simpático-refleja, de la osteoporosis y de las pseudoartrosis son muy populares. Además, este efecto también es aprovechable para usarlo en la cicatrización de lesiones de la piel, músculo, tendones y fascias.
Efecto relajante en la musculatura
La magnetoterapia en fisioterapia es muy eficaz como relajante muscular. Y lo es tanto en la musculatura de fibra lisa como en la de fibra estriada.
Los campos magnéticos actúan sobre el sistema simpático disminuyendo el tono muscular. Al comienzo del tratamiento, el efecto relajante de la magnetoterapia puede ser local. Sin embargo, conforme se continúa el tratamiento, llega a generar un amplio efecto sobre el sistema nervioso central debido a la disminución del tono simpático. Y esto se traduce en un efecto generalizado de relajación.
Un mejor descanso facilitará una recuperación más consistente. Al reducir el estrés, es más sencillo encarar una patología, la mente está más clara y eso permite ver la evolución. Además, evita el foco en los aspectos negativos del tratamiento o del proceso.
Regeneración de los tejidos
El aumento de la circulación local facilita la regeneración del tejido dañado.
Los campos magnéticos estimulan la producción de colágeno, la formación de vasos sanguíneos y de tejido óseo. Por tanto, no cabe duda de que, si conseguimos mejorar la circulación, activar los procesos energéticos y eliminar las sustancias de desecho, habremos sentado las bases para que el cuerpo se ponga en marcha y active su capacidad de regeneración al máximo.
En resumen, la magnetoterapia en fisioterapia resulta ser una técnica:
- Poco agresiva
- Que no causa dolor por sí misma
- Que calma el dolor que pueden generar distintas dolencias
- Que estimula el organismo en el proceso de regeneración
- Que tiene pocas contraindicaciones
- Y es fácil de aplicar tanto a nivel domiciliario como clínico.
Su eficacia se mantiene durante largo tiempo y es uno de los pocos equipos que tiene un gran poder de penetración. Esta capacidad es lo que le permite actuar en profundidad en el cuerpo humano.
Si tú o alguien de tu familia padeces de las dolencias que hemos mencionado, te sugerimos que consultes con tu fisioterapeuta para probar la magnetoterapia. Los dispositivos I-Tech Medical Division te pueden ayudar a mejorar tu situación en casa.
Y si tienes alguna duda, consúltanos aquí sin compromiso.
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