Popeye, un gran perro, mastín de doce años que sufre en sus articulaciones las consecuencias de la artrosis derivada de su longevidad. Nena, una alegre perrita mestiza con paraplejia derivada de una afección neurológica medular. Ulises, un yorkshire terrier cuyos ligamentos de la rodilla se rompieron mientras jugaba, por lo que tuvo que ser sometido a una compleja intervención quirúrgica.