Tratamiento de bolsas de ojos
Tratamiento de párpados hinchados
Tratamiento de eliminación de toxinas
Tratamiento de desintoxicación facial
Las bolsas de los ojos se caracterizan por una hinchazón en el párpado inferior. Pueden estar provocadas por el acúmulo de líquidos, por una presencia de grasa localizada o por un origen genético. El tratamiento de las bolsas de ojos es un tratamiento complejo.
En primer lugar, las bolsas de origen acuoso se deben a una modificación de los parámetros de acumulación hídrica de la persona que las padece. Esta alteración orgánica provoca las antiestéticas bolsas como manifestación de la incapacidad del riñón a eliminar y drenar el exceso de líquido. En ocasiones, los responsables de las bolsas de origen acuoso son la falta de sueño, el cansancio o el exceso de alcohol y tabaco. Son, sin lugar a dudas, las más comunes.
Muy vinculado con las bolsas de ojos, se presenta la hinchazón de párpados. Esta alteración estética se debe a una deficiencia de la microcirculación linfática del contorno ocular. Puede no tener relación con las bolsas, pero se agrava con éstas. Se suele observar al despertar, después de una noche de poco sueño o después de haber dormido mucho. Durante la noche se puede acumular líquido que es fácilmente drenado por el día gracias a los múltiples parpadeos que activan la microcirculación linfática. Una buena higiene de vida, con sueño suficiente, y evitando el consumo de alcohol es la mejor prevención para evitar los párpados hinchados.
Esta variedad de bolsa de ojos “acuosa” que se suele manifestar por las mañanas al levantarse se acostumbra a padecer en general cuando se duerme en exceso en una posición que favorezca el flujo de los líquidos humorales hacia la cabeza. Por ello, independientemente del tratamiento, se debe aconsejar al paciente afectado por estas bolsas que duerma con una almohada que eleve su cabeza del tronco.
En segundo lugar, las bolsas de origen graso se producen por una acumulación de tejido adiposo bajo los ojos. Estas bolsas pueden tener su origen en multitud de causas, pero se destaca la falta de emulsión de las grasas por el hígado. Se evidencian cuando la grasa sobre la que reposa el ojo provoca unas pequeñas hernias, que presionan el tejido conectivo y que se aprecian visualmente como abultamientos localizados bajo los ojos. Estas bolsas se tratan quirúrgicamente de forma permanente, pero también pueden ser mejoradas con un tratamiento continuado con Diatermia.
En tercer lugar, cuando las bolsas tienen origen genético, no se puede garantizar un resultado estético permanente bajo ninguna técnica actual. La biología del paciente es la que determina su continua reaparición. Estos casos tienen difícil tratamiento estético. Sin embargo, un tratamiento estético paliativo con Diatermia favorece la eliminación de toxinas de los exudados y mejora significativamente el aspecto del paciente.
Determinar el origen de la bolsa es sencillo y se realiza presionando ligeramente el párpado: en el caso de bolsas por hinchazón, se forma un pequeño hoyuelo que desaparecerá lentamente; en el caso de bolsas por grasa, se aprecia una presión constante y no se forma el hoyuelo característico.
Las bolsas son, pues, manifestaciones de disfunciones internas con las que están relacionadas. Por lo tanto, es difícil darles una solución si no se mejora la causa interna que las origina.
Si se consigue eliminar la causa que genera la disfunción estética, es lógico pensar que también se atenuará la consecuencia (las bolsas en sí). Si, por el contrario, se trabaja exclusivamente sobre la manifestación del problema, se podrá conseguir un efecto transitorio en función de cada organismo.
El tratamiento de bolsas de ojos persigue mejorar la eliminación de toxinas de los líquidos retenidos y de los exudados en el contorno de los ojos. Por ello, se debe mejorar la circulación linfática y la reducción del edema por la retención de líquidos.
El tratamiento consiste en la aplicación del equipo de Diatermia conjuntamente con un producto cosmetológico adecuado para la naturaleza de las bolsas: para aquellas de origen acuoso, se optará por un producto con principios activos drenantes o de tratamiento orbicular; para las bolsas de origen adiposo, se optará por un producto con principios lipolíticos. El producto cosmetológico seleccionado debe de tener una textura agradable para su penetración. Se dará prioridad a los cosmeticos en forma de gel. Las formas emulsionadas podrían agravar el problema.
A continuación, se aplicará el equipo de Diatermia tal y como muestran los gráficos adjuntos. La aplicación debe realizarse con confianza por parte del operador, seguridad y decisión.