Al dar de alta a un paciente hemipléjico, no basta con que este realice
algunos ejercicios o se desplace con ayuda de sus familiares; es necesario que el fisioterapeuta desarrolle una labor de control y actualización, que evalúe el domicilio y dé orientaciones sobre las modificaciones y adaptaciones necesarias en el baño, cama, sillones, prácticas de la vida diaria, etc.