ELISA ROMERO OLUCHA Y ROBERT ROIG REQUENA
2º DE FISIOTERAPIA, UNIVERSIDAD DE VALENCIA, 2008/2009
ÍNDICE Y PAGINACIÓN
(1) RESUMEN
(2) PALABRAS CLAVE Y ABREVIACIONES UTILIZADAS
(3) ABSTRACT AND KEY WORDS
(4) INTRODUCCION --> *Justificación
*Anatomía de la cabeza y del cuello
*Cefalea tensional
(5) OBJETIVOS
(6) MATERIAL Y METODOS
(7) RESULTADOS --> *Análisis de la etiología según autores
*Análisis de los tratamientos utilizados
*Protocolo de diagnóstico
*Incidencia
(8) DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
(9) ENTREVISTA
(10) RELATO DE UNA PACIENTE CON CEFALEA TENSIONAL
(11) REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
RESUMEN
La cefalea tensional es un problema que afecta a muchas personas, pero hoy en día aún no se ha determinado con certeza la etiología del problema, y, por tanto, los diferentes tratamientos propuestos son más o menos efectivos, aunque ninguno la erradica totalmente.
Entre los diferentes tratamientos analizados, los más beneficiosos son los fisioterápicos y osteopáticos, ya que los pacientes que reciben este tipo de tratamiento muestran una clara mejoría. Por el contrario, los medicamentos pueden llegar a crear adicción en los pacientes.
Por último, aún hace falta estudiar y analizar tanto la etiología como la efectividad de los tratamientos, ya que los pacientes no ven una salida clara a su problema, llegando a sentir una sensación de impotencia.
PALABRAS CLAVE Y ABREVIACIONES
*CEFALEA TENSIONAL, OSTEOPATÍA, FISIOTERAPIA, TERAPIA MANUAL
*TTH (tension-type headache); ME (manipulación espinal); TAC (tomografía axial computarizada); RMN (resonancia magnética nuclear); EEG (electroencefalograma); EMG (electromiografía); ATM (articulación temporomandibular); ECOM (esternocleidooccipitomastoideo)
ABSTRACT
The tension-type headache is a problem that affects a lot of people, but nowadays it hasn’t yet been determined with certainty the etiology of the problem, and therefore the various proposed treatments are more or less effective, although neither the totally eradicated.
Among the different treatments analyzed, the more beneficial are the physiotherapical and osteopaths, because patients who receive this treatment showed a marked improvement. By contrast, medicine can get to create addiction in patients.
Finally, still need to study and analyze both the etiology as the effectiveness of treatments, because patients don’t see a clear exit to their problem, coming to feel a sense of powerlessness.
KEY WORDS
*TENSION-TYPE HEADACHE, OSTEOPATHY, PHYSIOTHERAPY, MANUAL THERAPY
INTRODUCCIÓN
JUSTIFICACIÓN
La cefalea tensional se considera la más común de todas las cefaleas, casi todas las personas la hemos sufrido alguna vez en su forma episódica. Es una enfermedad inherente al hombre. Desde siempre ha intentado buscar la solución a este problema.
Actualmente en los países desarrollados solo la cefalea tensional afecta desde el 30% al 78% de la población total: 2/3 de varones y cerca del 80% de las mujeres. La actividad social y laboral se ve reducida un 60% de media en aquellas personas que la sufren, por tanto la cefalea altera considerablemente la calidad de vida(al menos en el 44% de los casos).
Las consultas por cefalea en atención primaria en los hospitales son muy frecuentes (lo que se traduce en un enorme coste asistencial para la Seguridad Social). Los pacientes con cefalea suelen visitar a médicos de diferentes especialidades, recibiendo tratamientos sin resultados, ya que los médicos que les tratan, muchas veces, no le dan la importancia al problema que el paciente necesita, llevándolos a un círculo vicioso de dolor crónico que acaba en depresión y otros tipos de problemas.
ANATOMÍA DE LA CABEZA Y DEL CUELLO
La función del cráneo es albergar y proteger parte del sistema nervioso central (encéfalo), también aloja el sentido estatoacústico. Está formado por 6 huesos: frontal, etmoides, esfenoides, occipital, parietal y temporal, que articulan mediante suturas (sinartrosis).
La función de la cara es albergar el aparato de la masticación, se fijan los músculos de la mímica y se alojan los órganos de los sentidos visual, olfatorio y gusto. Está formado por los huesos maxilar superior e inferior, unguis, palatinos, cornetes, malares, vómer y los huesos propios de la nariz.
Tanto en el cráneo como en la cara se insertan numerosos músculos, pero los más implicados en la cefalea tensional son el frontal, temporal, epicraneal, occipitofrontal, auriculares, occipital y masetero.
En la región anterior del cuello están los músculos largos del cuello, recto anterior menor y mayor, escalenos, digástrico. En la región antero lateral está el ECOM principalmente. Por último, en la región posterior encontramos los rectos, oblicuos, transverso espinoso, interespinoso del cuello, complejo mayor, complejo menor, transverso del cuello, esplenio, angular de la escápula y trapecio.
Los vasos principales de la cabeza y del cuello son las arterias carótidas, occipitales, auriculares, temporales, vertebral, cervicales y escapulares; también venas satélites de las arterias principales
Los doce pares de nervios craneales, el plexo cervical y el plexo braquial son los principales afectados en la cefalea tensional.
Los diferentes análisis y estudios consultados muestran la implicación de todas estas estructuras y la complicidad a la hora de buscar la causa-origen de este problema, ya que se ven implicados factores biológicos y psicológicos.
LA CEFALEA TENSIONAL
Según su etiología, existen dos grupos de cefaleas, las primarias y las secundarias (asociadas a otras patologías). La cefalea tensional se encuentra dentro de las cefaleas primarias, ya que de momento no se ha asociado a ninguna causa.
Su origen idiopático o como consecuencia de una contracción muscular primaria (según autores) ha dado lugar a una amplia terminología usada para referirse a ella: cefalea ordinaria, por estrés, dolor de cabeza por contracción muscular, cefalea primaria, dolor de cabeza benigno, cefalea psicogénica o psicomiogénica, enfermos de “Cluster”, cefalea de Horton, TTH (tensión-type headache) Así, esto genera una controversia sobre la posible etiología de este “dolor de cabeza”.
Cabe diferenciar la migraña común de la cefalea primaria, ya que existen diferencias entre la fisiopatología, tipo de dolor y curso de ambas.
La doctora Targa Benet (1997) (18), asegura que las personas que la padecen sienten una opresión dolorosa cefálica, bilateral como una banda que rodea la cabeza y que puede llegar a la nuca, con dolor sordo, constante y que aparece tras muchas variadas circunstancias. Por otra parte, pacientes afectados por esta dolencia, dicen: “la cefalea es como una presión constante en toda la cabeza, como aturdimiento, dolor difuso y poco localizado en el entrecejo, embotamiento de los sentidos (sensación de mareo)”.
Según la recidiva, Silver (2007) (16) diferencia la TTH en episódica y crónica. La episódica es aquella que dura desde 30 minutos a 7 días, y los episodios suceden menos de 180 días al año. En cambio, la crónica es aquella que dura más de 15 días al mes, durante al menos 3 meses.
El tratamiento más habitual para combatir los síntomas de la cefalea tensional es la administración de fármacos analgésicos (aunque no solucionan el problema en sí mismo). También se suele ofrecer como tratamiento la actividad física como liberadora de endorfinas, pero como los analgésicos, no solucionan la cefalea.
OBJETIVOS
- Analizar las diferentes hipótesis de causa de la cefalea tensional, así como valorar su origen principal en que más hayan coincidido los expertos en el tema.
- Proponer el protocolo fisioterápico y osteopático más eficaz hoy en día para la mejora de dicho malestar.
- Concienciar a los diferentes profesionales de que este es un problema en el que aún queda mucho por investigar y los tratamientos actuales no actúan sobre el origen del problema.
MATERIAL Y MÉTODOS EMPLEADOS
Para realizar este artículo se han empleado diferentes medios para obtener la información, como internet, bibliotecas y consulta a profesionales.
Se han consultado diferentes bases de datos de ciencias de la salud como medline, pubmed y PEDro.
Para la búsqueda en pubmed y medline han sido utilizados los siguientes descriptores con el fin de obtener artículos de relevancia sobre la cefalea y su tratamiento:
- “Tension-type headache” [MESH].
- “Physical therapy” [MESH] AND “tension-type headache” [MESH].
- (Tension-type headache) [MESH] AND “osteopathy” [MESH].
- (Tension-type headache) [MESH] AND “manual therapy” [MESH].
- (Tension-type headache) [MESH] AND “treatment” [MESH].
Los libros empleados son de las bibliotecas de las Facultades de Medicina y Fisioterapia de la Universidad de Valencia.
Artículos en diferentes páginas de internet especializadas en la cefalea y la migraña, excluyendo aquellos que no se centraran en la cefalea tensional.
Por último, también se ha consultado a diferentes profesionales (médicos neurólogos, osteópatas y fisioterapeutas) con el objetivo de que proporcionen su punto de vista sobre el problema y su opinión sobre los diferentes tratamientos propuestos hasta la fecha.
RESULTADOS
ANÁLISIS DE LA ETIOLOGÍA DE LA CEFALEA TENSIONAL SEGÚN AUTORES:
Según Trkanjec y Aleksic-Shihabi (2008) (20), la cefalea tensional es uno de los más comunes e importantes dolores de cabeza. Aunque aún se tiene un limitado conocimiento sobre las causas del problema y sus soluciones (Speciali, 2008) (17) .
No obstante, hay numerosos estudios sobre las posibles causas, aunque no dejan de ser teorías y no conclusiones finales.
En un pasado se consideró que la TTH era de naturaleza periférica, secundaria a la contracción muscular e irritación de los nervios de la cabeza y cuello, teoría hoy en día discutible, ya que muchos autores dicen que esta contracción es secundaria al dolor primario. Así, hemos hecho un análisis de las diferentes hipótesis acerca de la etiología del problema que presentan las investigaciones más recientes.
El Dr. Isaac Mosquera (1998) (14) diferenció las causas según los 2 tipos de cefaleas que presentó Brain en 1934:
- Cefalea Tensional Tipo I:
Cefalea de larga evolución (meses o años) que se presenta en la mañana al despertarse, con duración de varias horas, intermitente y luego continuo, cuya distribución en el cráneo es señalada por el dedo índice o con la mano extendida de localización hemicraneal o bilateral con sensación de comienzo en el cuello o región occipital e irradiada hacia el vertex y raras veces a la frente. Otros mencionan hipersensibilidad al tacto en la región cervical, el calor lo alivia y el frío lo agrava, los movimientos del cuello lo exacerban, a menudo puede ir acompañado de bruxismo y extenderse hacia las fibras musculares superiores del trapecio y los hombros, puede irradiarse hacia la parte anterior o posterior del pabellón de la oreja. Se comprueba su origen orgánico por su alivio parcial o total con analgésicos.
- Cefalea Tensional Tipo II:
En este tipo de cefalea la característica fundamental es el dolor difuso o sensación de presión. La historia se extiende por meses y años. Los síntomas son intermitentes y aparecen tardíamente todos los días de la semana, desde que se levanta el paciente hasta que se acuesta, la descripción del dolor en estos pacientes es imprecisa a diferencia del Tipo 1, en el cual predomina la localización precisa del dolor por parte del paciente. Nada alivia el dolor excepto cuando el paciente esta distraído o en alguna actividad que lo divierte o duerme. El dolor ocurre por alguna discusión o por estar sometido a situaciones de estrés. Si se le pregunta al paciente por una descripción específica él no se queja de dolor, sino de una molestia permanente tipo presión. No responde a los analgésicos comunes, sin embargo el paciente insiste en los mismos y los va cambiando con la esperanza de encontrar alguno que le alivie, de este modo incurre en automedicación y sus respectivos efectos secundarios, a menudo inician diferentes consultas por efectos secundarios de los analgésicos que consumen, siendo la más frecuente la gastritis medicamentosa.
- El dolor de cabeza localizado tipo I generalmente proviene de patologías de base en el cuello, articulación temporo-mandibular, extensión prolongada del cuello durante la intubación para cirugías, posiciones viciosas durante las horas de trabajo, inmovilidad y rigidez en pacientes de edad avanzada y en aquellos con inicio de enfermedad de Parkinson (por la rigidez característica).
- El dolor de cabeza tipo II es debido a estados de ansiedad o depresión, sin embargo no se conoce cuál es la forma como el sistema nervioso selecciona partes del cuerpo para mostrar una somatización.
Según Torelli y Abrignani (2008) (19), los factores psicológicos y emocionales son verdaderos factores de riesgo. De hecho, el estrés y la ansiedad son los factores más comunes en la TTH. Afirman que se han encontrado pruebas de comorbilidad entre la cefalea y los trastornos psiquiátricos.
Anderson y Seniscal (2006) (1) realizaron en pacientes con TTH diferentes EMG y no se correspondían con la severidad del dolor de cabeza. Llegaron a la conclusión de que la mejor forma para diagnosticar pacientes con TTH crónico es la palpación muscular en cuello y cráneo, ya que se sabe que la sensibilización del SNC provoca la excitabilidad de las neuronas que hacen que el individuo se vuelva más susceptible a los dolores de cabeza, y estos se hagan crónicos. Añadieron que el estrés psicológico y la fatiga son participantes en la cefalea tensional.
Cecilia Targa Benet (1997) (18) concretó que la musculatura cervico-facial tiene en el hombre, además de su función motora, un significado biológico de traducción del estado de alerta y del estado de ánimo, por tanto esta contracción será secundaria a un estrés primario. Analizó que tiene que existir una asociación cortical que identifique dichas contracciones como algo doloroso y vivido como estresante, y el cerebro, a través del sistema reticuloespinal, activa las motoneuronas gamma que actúan sobre los husos musculares aumentando y perpetuando su contracción muscular dando lugar a un circulo vicioso (contracción primaria -->asociación cortical al dolor -->activación motoneuronas gamma -->mayor contracción -->mayor dolor).
En un estudio realizado por Fernández de las Peñas y Deborah Falla (2007) (9) se llegó a la conclusión de que las mujeres con TTH presentaban una gran coactivación de la musculatura antagonista al realizar la flexión y extensión cervical, en comparación con las mujeres sanas. Esta coactivación de la musculatura antagonista podría reflejar una reorganización de la estrategia del control motor en pacientes con TTH, provocando potencialmente sobrecarga muscular y un incremento de la nocicepción. Se analizaron con EMG el ECOM y el esplenio del cuello.
ANÁLISIS DE LOS TRATAMIENTOS MÁS UTILIZADOS:
- FISIOTERAPIA -->Dentro del tratamiento fisioterápico se utilizan principalmente el masaje convencional, la movilización pasiva cervical, las correcciones posturales, la potenciación de la musculatura craneocervical, así como también técnicas electroterápicas y métodos de relajación.
Van Etterkoven y Lucas (2006) (21) estudiaron el efecto del entrenamiento de la musculatura craneocervical en combinación con otros tratamientos fisioterápicos (como los anteriormente comentados). La fisioterapia se basó en técnicas de masaje convencional (effleurage, petrissage y fricciones), movilización pasiva del raquis cervical y también correcciones posturales para corregir la flexión de la cabeza, protracción de hombros, cifosis torácica aumentada y una lordosis lumbar aplanada (postura que adoptan la mayoría de pacientes en sedestación cuando están afectados por cefalea tensional). Al mismo tiempo, realizaron con los pacientes una serie de ejercicios con gomas elásticas para ofrecer resistencia con el objetivo de potenciar y/o recuperar el control muscular de las regiones cervicoescapular y craneocervical.
Estos ejercicios se ejecutaron para hacer frente al posible deterioro de la musculatura extensora del cuello. Se colocó la banda elástica como una banda circular alrededor de la región craneocervical y rodeando la cabeza, los extremos se fijaron delante de la cabeza en una jaula de Rocher o similar y un poco por encima de la horizontal (como muestra el dibujo). La ejecución del ejercicio consistió en realizar movimientos de extensión del cuello de forma lenta y controlada, haciendo también trabajo isométrico en diferentes rangos del movimiento. El protocolo fue realizar los ejercicios 2 veces al día durante 10’. En el post-tratamiento se siguieron haciendo pero solo 2 veces por semana.
Al terminar el tratamiento, se mejoró significativamente la frecuencia, intensidad y duración de los brotes de cefalea tensional. Sin embargo, a los 6 meses de terminar el tratamiento, los pacientes que no hicieron ejercicios de entrenamiento craneocervical empeoraron, mientras que los que sí que lo hicieron mantuvieron la mejora. Al mismo tiempo, estos pacientes dejaron de tomar tanta medicación para disminuir la sintomatología de la cefalea tensional como lo hacían antes de empezar el tratamiento fisioterápico.
Por otra parte, no está claro el por qué mejoran los pacientes con el entrenamiento craneocervical. Si mejoran por los movimientos realizados, que modulan la percepción del dolor, o mejoran por el efecto que tiene sobre la postura, que termina reduciendo el tono muscular cervicoescapular.
Bronfort (2004) (6), en unos análisis que realizó, opina que también, diferentes técnicas electroterápicas, como el TENS y el láser por ejemplo, son útiles, aunque solo como tratamiento profiláctico de la cefalea tensional.
Luis Bernal (2008) (3) afirma que el tratamiento fisioterápico se debería basar en la relajación (métodos de Schultz y Jacobson), el masaje y por último, los estiramientos de la musculatura del cuello afectada por la cefalea tensional, trabajando también con el método Mc.Kenzie.
- TERAPIA OSTEOPÁTICA --> En el tratamiento osteopático se utilizan básicamente las manipulaciones vertebrales, aunque también se describen algunas manipulaciones en la ATM (articulación temporo-mandibular) y craneales.
Varios estudios preliminares informaron de una reducción en la frecuencia e intensidad del dolor gracias a la manipulación vertebral. Un estudio controlado comparó la manipulación vertebral con la terapia con medicamentos para este tipo de dolor de cabeza. Ambos tratamientos dieron mejorías similares, pero la manipulación provocó mucho menos efectos secundarios. Un mes después del final del tratamiento, sólo el grupo que fue manipulado mostraba una mejoría continua.
Hoyt (1979) (13) comparó las manipulaciones espinales con dos controles sin tratamiento (palpación y reposo). Cada intervención tenía una única sesión de diez minutos. Se observó una reducción del dolor significativamente mayor en el grupo de manipulación espinal que en los otros grupos, inmediatamente después del tratamiento. Debido a que el estudio evaluó sólo los efectos inmediatos de un solo tratamiento, proporciona poca información acerca de la función de la manipulación espinal en el tratamiento de la cefalea crónica/recurrente.
Boline (1995) (4) comparó las manipulaciones y el fármaco más utilizado para este tipo de cefalea, la amitriptilina. El tratamiento duró seis semanas. El grupo de manipulación vertebral tuvo dos sesiones de 20 minutos por semana con manipulación espinal, 5-10 minutos de calor húmedo y 2 minutos de masaje suave. Para el grupo de amitriptilina, la dosis del fármaco era 10 mg por día en la primera semana, 20 mg por día en la segunda semana, y 30 mg por día cada semana posterior. Al finalizar un período de tratamiento de seis semanas, el grupo de tratamiento manipulativo tuvo dolores de mayor intensidad, pero también tuvo menos efectos secundarios. Los dos tratamientos fueron similares en cuanto a la frecuencia de la cefalea y al uso de fármacos de venta sin receta (que también se analizó). Sin embargo, a las cuatro semanas después del tratamiento, el grupo manipulativo tuvo resultados mejores en cuanto a la intensidad del dolor de la cefalea, la frecuencia y el uso de fármacos de venta sin receta.
Bove (1998) (5) comparó una combinación de manipulación vertebral y masajes con láser de placebo. El tratamiento era de ocho sesiones de 15 minutos durante cuatro semanas. Se hicieron manipulaciones de alta velocidad y amplitud baja. Los masajes consistían en masajes de fricción profunda y tratamiento del factor desencadenante a los músculos del cuello y los hombros. Para la intensidad de la cefalea, los resultados favorecían en el grupo de manipulación, aunque no se encontraron diferencias significativas a la semana o a tres meses después del tratamiento. No hubo diferencias considerables entre grupos en el uso diario de analgésicos o en las horas de cefalea, en los dos puntos temporales.
Los autores llegaron a la conclusión de que el tratamiento manipulativo solo no tiene un efecto positivo sobre la cefalea episódica de tipo tensional. Por su diseño, el ensayo no evaluó el efecto aislado de ME; sino el efecto combinado de ME y masajes de los tejidos blandos. No se sabe si existe una interacción causada por la combinación del ME con los masajes de los tejidos blandos.
- OTRAS ALTERNATIVAS --> Durante la búsqueda de artículos se han encontrado algunos resultados sobre el uso de la acupuntura, técnicas de relajación y el “toque terapéutico” (intención de sanar por medio de la imposición de manos más reposo y respiración profunda con efecto placebo) para la cefalea tensional. Ninguno de estos métodos mantenía sus efectos a largo plazo (alivio momentáneo).
PROTOCOLO DE DIAGNÓSTICO:
- Anamnesis (antecedentes familiares, situación del paciente, edad, sexo)
- Palpación y valoración del balance muscular, articular y del dolor, también se realizarán evaluaciones neurológicas (coordinación, nistagmus, etc).
- Pruebas complementarias como el TAC, hemogramas, RNM, punción lumbar (para descartar meningitis y hemorragias subaracnoideas) y EEG.
- Diferenciar la CEFALEA TENSIONAL de la MIGRAÑA:
CEFALEA TENSIONAL:
• Dolor opresivo (como una banda alrededor de la cabeza)
• Intensidad moderada, se puede continuar con las actividades diarias
• No existen náuseas ni vómitos
• No se produce fotofobia o fonofobia
• Suele durar de 30 minutos a 7 días
• Signo de traqueteo negativo
MIGRAÑA:
• Dolor pulsátil
• Muy intenso e incapacitante
• Habitualmente existen náuseas y vómitos
• Se produce aura y fotofobia o fonofobia frecuentes
• De 4 a 72 horas
• Traqueteo positivo
- Determinar tipos de cefaleas de tensión
- CEFALEA DE TENSIÓN POCO FRECUENTE:
- Menos de 1 día al mes de promedio (< 12 días al año).
- CEFALEA DE TENSIÓN FRECUENTE:
- Entre 1 y 15 días al mes en los últimos 3 meses (menor o igual a 180 días al año).
- CEFALEA DE TENSIÓN CRÓNICA:
- Mayor o igual a 15 días de media durante más de 3 meses (mayor o igual a 180 días al año).
INCIDENCIA:
- Edad de comienzo: Suele ser desde los 11 a los 40 años. Pueden corresponder a causas orgánicas y requieren un estudio detallado
- Localización: Es habitualmente bilateral, aunque puede ser ocasionalmente unilateral si va asociada a migraña (cefalea tensional mixta).
- Carácter: Suele ser continua.
- Intensidad: Moderada.
- Epidemiología: Alrededor del 80% de la población total sufrirá en algún momento de su vida algún episodio de cefalea tensional. El dolor de cabeza es una de las 10 mayores causas de consulta al médico en atención primaria, y de esos casos, cerca de la mitad corresponden a cefalea tensional.
- Sexo: Clara predominancia en las mujeres (80% de ellas la han sufrido alguna vez)
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
Respecto a la etiología del problema, no queda totalmente definido el origen de la cefalea tensional en los diferentes estudios realizados hasta la fecha. Existe gran variedad de opiniones respecto a la misma en todos los estudios analizados, llegando a contradecirse algunos de ellos.
En un primer momento se dijo que esta cefalea era secundaria a una tensión muscular primaria, más tarde se asoció a problemas psicológicos como el estrés y la ansiedad, opinando que la cefalea tensional era una manifestación de ellos que provocaba una contracción muscular secundaria. Puesto que a esta segunda teoría no se le atribuye ninguna causa principal y factible, aún hoy en día no se puede actuar sobre el origen del problema.
Otras teorías coinciden con los estudios realizados por Targa Benet (1997) (18) y Fernández de las Peñas-Deborah Falla (2008) (9) que afirman que este dolor proviene de una desorganización de los patrones motores y de las vías del dolor, produciéndose una conexión anómala que relaciona la contracción muscular de los músculos extensores del cuello con una respuesta nociceptiva, que por mecanismos de protección coactiva la contracción de la musculatura antagonista (anterior del cuello) y viceversa produciéndose un estado permanente de tensión (que a su vez vuelve a relacionarse con un patrón anómalo del dolor creando un bucle de retroalimentación positivo, volviendo este dolor cada vez más frecuente). Por tanto, la etiología del problema no sería psicógena, sino biológica.
Este desconocimiento de la etiología de la cefalea tensional lleva también en parte a un desconocimiento del mejor tratamiento posible para erradicarla. Sin embargo, se han realizado multitud de estudios y análisis en los que se comparan y prueban diferentes tratamientos para mitigar los efectos de la misma y atenuar su incidencia sobre el paciente.
Actualmente, a la mayoría de los pacientes que acuden a consulta primaria por cefalea tensional se les trata con medicamentos únicamente, creando de esta forma una adicción a los mismos ya que llegarán a tomárselos cada vez que tengan un episodio. Por otra parte, también hay que tener en cuenta que estos medicamentos no están ausentes de efectos secundarios, por lo que también podrían haber reacciones adversas como respuesta al tratamiento.
En los estudios que hemos analizado, se llega a la conclusión de que no es beneficioso para el paciente ser tratado solo con medicamentos, que sería mejor para ellos combinar dicho tratamiento con técnicas de fisioterapia y osteopatía.
Se ha comprobado que el tratamiento con fisioterapia y osteopatía (diferentes técnicas básicas de masaje, movilizaciones pasivas cervicales, reeducación postural, entrenamiento de la musculatura craneocervical, manipulaciones espinales y métodos de relajación) mejora considerablemente la sintomatología de la cefalea tensional, no solo mientras dura el tratamiento, sino que también, utilizándose de manera combinada todas estas técnicas, una vez haya terminado el tratamiento principal.
Por otra parte, también se ha comprobado que cuando un paciente se trata fisioterápica y osteopáticamente para la cefalea tensional, deja de tener necesidad de tomar tanta medicación, por tanto, se reducen los efectos secundarios derivados de ella (vómitos, problemas de estómago y psicológicos como estados de depresión y ansiedad por impotencia ante la enfermedad).
Por tanto, creemos necesario que se aumente la prescripción de tratamiento fisioterápico y osteopático por parte de los médicos, ya que como se muestra en nuestro análisis, puede llegar a ser más efectivo que la medicación para disminuir los efectos de la cefalea tensional.
A partir de las personas afectadas por la cefalea tensional con las que hemos hablado, llegamos a la conclusión de que, pese a no llegar a ser un dolor incapacitante la sensación de desesperanza e impotencia ante este dolor es predominante, llegando a convertirse en el problema principal en sus vidas, y por tanto, disminuyendo su estado de ánimo y sus relaciones interpersonales, finalizando generalmente en un estado severo de depresión (leer relato adjunto). Con esto queremos hacer hincapié en la importancia de la investigación y de dedicar el tiempo necesario a estos pacientes, comprendiendo que, tras este problema, es muy probable que existan otros, también importantes, que puedan estar agravando la situación. Ya que hoy en día no se puede actuar directamente sobre el origen del problema se debería pasar también a un siguiente plano tras aliviar el dolor, recomendando a estos pacientes que consulten a otros profesionales (psicólogos) y ocupen su tiempo libre con actividades desestresantes para que esto no vaya a más.
ENTREVISTA
Entrevista realizada al doctor José Miguel Láinez Andrés, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Clínic Universitari de Valencia, delegado español de la European Headache Federation y miembro de la International Headache Society y la American Academy of Neurology entre otras asociaciones.
- ¿Cuál cree que es la etiología de la cefalea tensional?
- Su etiología hasta el momento es desconocida, aunque existen factores genéticos y constitucionales que pueden llegar a determinar la aparición de la cefalea tensional. Sin embargo, los principales factores desencadenantes de la enfermedad son la ansiedad y el estrés, que llegan a provocar una contractura muscular en la región del cuello, esta contractura (acompañada de dolor) provocaría más estrés, y así, formaría un círculo vicioso.
- ¿Se está investigando acerca de la cefalea tensional? ¿Sobre qué se está poniendo más empeño en la investigación?
- Sí, actualmente se está investigando, sobre todo centrándose en las formas crónicas, más concretamente sobre los posibles mecanismos de perpetuación del dolor. Entre otras cosas, se están empleando mucho las medidas neurofisiológicas para analizar dichos mecanismos.
- ¿Cuál es la incidencia de casos de cefalea tensional en España?
- En España, alrededor del 40% de la población la padece o ha padecido. Sin embargo, entre un 60% y un 70% tienen algún tipo de cefalea, siendo el 4’5% de esos casos cefaleas crónicas (el 2% son casos de cefalea tensional crónica).
- ¿Qué pruebas se suele hacer a los pacientes para diagnosticar la cefalea tensional?
- El diagnóstico clínico que se les suele hacer a los pacientes para diagnosticarla es mirarlos a la cara y palparles el cuello, entre otras cosas, para comprobar si hay sensación de tensión en la musculatura de la zona.
- Para descartar otras cefaleas, se les hacen también otras pruebas diagnósticas complementarias.
- ¿Cuáles son los tratamientos más utilizados hoy en día? ¿Es efectiva la fisioterapia?
- Los tratamientos dependen principalmente de la frecuencia de aparición de las crisis.
- En las de aparición episódica, los tratamientos empleados son los analgésicos para combatir las crisis, como el paracetamol por ejemplo. Los antiinflamatorios no esteroideos (AINES) también se suelen utilizar.
- En las formas crónicas, lo principal es enseñar al paciente a saber manejar las situaciones de estrés en las que se vea inmerso, también la relajación y el biofeedback se emplean con asiduidad. En estos casos, la fisioterapia también es muy recomendable, ya que prácticamente en todos los casos, la cefalea tensional cursa acompañada de contractura muscular. Sin embargo, el fisioterapeuta también debería tener en cuenta la terapia psicológica, como los métodos de relajación por ejemplo. No obstante, en los casos más graves, estos tratamientos se deben combinar también con medicamentos (relajantes musculares y analgésicos).
- ¿Cuáles son las principales diferencias entre la migraña y la cefalea tensional?
- La migraña tiene una causa más genética, sus episodios son mucho más intensos, llegando a provocar náuseas y vómitos. Los pacientes con migraña suelen tener también cefalea tensional, mientras que los que padecen cefalea tensional no tienen por qué tener migraña.
RELATO DE UNA PACIENTE CON CEFALEA TENSIONAL FRECUENTE
“Yo llevo un año padeciendo cefalea tensional, con sus días mejores y sus días peores, pero siempre con esa extraña sensación de presión difusa en torno a los ojos y alrededor de la cabeza... Es cierto, que no lo puedo considerar un dolor incapacitante pero sí es una molestia bastante importante que te acompaña a diario y que prácticamente limita tu vida... De hecho desde que empecé con esta extraña enfermedad todo ha cambiado en torno a mí y mi personalidad... Es difícil darle un porqué a esto, pero esta "pequeña molestia" puedo cambiarnos para siempre... Me es difícil describir la sensación pero quien la haya tenido alguna vez me comprenderá perfectamente. Es como si tus sentidos no funcionaran al 100 %, como una sensación de adormecimiento, falta de concentración, estos son algunos de los muchos síntomas de nuestra querida cefalea tensional... Muchas veces os habréis preguntado ¿Por qué nosotros? ¿Por qué me tiene que ocurrir esto a mí? Bueno, la verdad es que parte de culpa si la tenemos, nuestros pensamientos y nuestra manera de ver la vida son los que han contribuido a crear esta pequeña molestia en nuestra cabeza... Enfermedad psicosomática le llaman...
En mi caso todo empezó hace un año, era una persona completamente feliz, segura de mí misma, sociable, montones de amigos... obsesionado con que todo fuera perfecto, de repente un día me vi envuelto en un embrollo del que salí con esta extraña enfermedad, fueron dos semanas de auténtico estrés emocional, de ese querer vivir al límite hasta que un día tu cabeza te dice: "hasta aquí has llegado"... Fue algo lo que creó dentro de mí esta enfermedad, la traición... De repente un día cortas con tu novio y te peleas con tu mejor amiga, todo ello relacionado, los dos se ponen en tu contra y tú solo deseas morirte pero a la vez un odio fulminante se apodera de tu cuerpo. Esa frustración, ese estado de shock, esa rabia y esa impotencia desencadenan en esta enfermedad... ¿Cómo es posible que una discusión desencadene en una cefalea tensional? A veces miro atrás y me digo, quizá si me hubiera tomado las cosas de otra manera nada de esto hubiera sucedido, pero no me gusta buscar culpables, no culpabilizo ni a mi novio ni a mi mejor amiga, somos nosotros los que creamos esto, con nuestra forma de ser...
La verdad es que nada de esto es fácil, nos llega a afectar psicológicamente... los dos primeros meses caí en una depresión pero poco a poco fui recuperándome... En todo este año jamás he tomado ninguna medicación, quizá alguna vez paracetamol cuando el dolor era más fuerte... Ha sido el año más duro de mi vida, no es nada fácil vivir con la cefalea tensional, es muy limitante... Intento tener fe en que algún día se pasará, es lo único que me da fuerzas para vivir...
En todo este tiempo he podido comprobar que hay ciertas cosas que aunque no la quiten del todo, si pueden mejorar esta sensación de presión y aturdimiento... En mi caso, soltar adrenalina es realmente beneficioso, hablo de machacarte en el gimnasio 1 hora diaria cada día, además de relajarte libera mucho esta tensión y es por eso que mejora mucho la cefalea tensional...Esta semana he empezado a hacer yoga, y aun estoy a la espera de saber cómo me va.
La cefalea tensional es algo muy serio, aunque los médicos no le den importancia, puede afectar más psicológicamente más de lo que se cree... O si no, miradme a mí, hace un año era una persona muy feliz, estaba en la universidad, era una persona muy popular, tenia pareja y un montón de amigos... A día de hoy, me he tenido que tomar un año sabático para hacer un parón en mis estudios y volver a mi casa, no tengo pareja, he perdido a muchísimos amigos, no soy tan social como antes... Podría tirarme horas hablando de lo que mi vida ha llegado a cambiar... Pero bueno, mando un mensaje de esperanza, hay que seguir luchando por ello, porque solo se vive una vez y hay que seguir luchando, no tenemos otra opción.”
BIBLIOGRAFÍA
- Anderson R., Seniscal C. (2006). A comparison of selected osteopathic treatment and relaxation for tension-type headache. Headache, 2006; 46: 1273-1280.
- Begal ME., Lipton RB. (2005). Tension-type headache: Classification and diagnosis. Current Pain Headache reports, Dec; 9: 423-429.
- Bernal L. (2008). Fisioterapia en las algias crónicas. Extraído el 29 Octubre de 2008 de www.luisbernal.es/descargas/archivos/11algias.pdf.
- Boline PD., Kassak K., Bronfort G. (1995). Spinal manipulation vs amitriptyline for the treatment of chronic tension-type headaches: a randomized clinical trial. Journal of Manipulative and Physiological Therapeutics, 1995; 18: 148-154.
- Bove G., Nilsson N. (1998). Spinal manipulation in the treatment of episodic tension-type headache: a randomized controlled trial. Journal American Medical Association, 1998; 280: 1576-1579.
- Bronfort G. et al (2004). Non invasive physical treatments for chronic/recurrent headache. Cochrane Database System Review, 2004; 3: CD001878.
- Damen L. et al (2004). The effectiveness of physiotherapy and manipulation in patients with tension-type headache: a systematic review. Pain, Dec; 112: 381-388.
- Downie P. (1989). Neurología para fisioterapeutas. Buenos Aires: Editorial Médica Panamericana.
- Falla D., Fernández de las Peñas C. (2007). Cervical muscle co-activation in isometric contractions is enhanced in chronic tensión-type headache patients. Cephalalgia, 2008, May; 28: 744-751.
- Farinelli I. (2007). Aspirin and tension-type headache. The Journal of Headache and Pain, Feb; 8: 49-55.
- Fernández de las Peñas C. (2008). Physical therapy and exercise in headache. Cephalalgia, Jul; 28: 36-38.
- Fernández de las Peñas C. et al (2006). Are manual therapies effective in reducing from tension-type headache?. The Clinical Journal of Pain, Mar-Apr; 22: 278-285.
- Hoyt WH., Shaffer F., Bard DA. (1979). Osteopathic manipulation in the treatment of muscle-contraction headache. Journal of the American Osteopathic Association, 1979; 78:322-325.
- Mosquera I. (1998). Cefalea tensional, ¿una enfermedad psicosomática?. Ponencia presentada al Primer Congreso Virtual Iberoamericano de Neurología. Extraído el 27 Octubre de 2008 de www.neurologia.rediris.es/congreso-1/conferencias/cefaleas-5.html.
- Pabst R., Putz R. (2006). Sobotta. Atlas de anatomía (22ª ed.). Madrid: Editorial Médica Panamericana.
- Silver N. (2007). Headache (chronic tension-type). American Family Physician, Jul; 76: 114-116.
- Speciali JG. (2008). Tension-type headaches. Experte review of neurotherapeutics, May; 5: 839-853.
- Targa C.: “Cefalea por tensión”. En: Cefalea. Barcelona: Editorial Harcourt, 1997. Pág. 48-57.
- Torelli P., Abrignani G. et al (2008). Human psyche and headache: Tension-type headache. Neurological Sciences, May; 29: S93-95.
- Trkanjec Z., Aleksic-Shihabi A. (2008). Tension-type headache. Acta medica Croatica, May; 62: 205-210.
- Van Ettekoven H., Lucas C. (2006). Efficacy of physiotherapy including a craniocervical training programme for tension-type headache; a randomized clinical trial. Cephalalgia, 2006; 26: 983-991.